Besmirch Dwarves



Las raíces de la historia enana se pierden en los albores del tiempo. Perdido entre sus inicios se encuentra el origen de los Enanos Malditos. Las propias leyendas enanas sugieren que los dioses crearon la raza enana para forjar y dar forma al mundo, y que en la juventud de su raza, los inocentes y recién creados enanos fueron embaucados por aquellos que moraban antes que ellos en el mundo que debían forjar. Sutilmente pervirtieron a muchos de ellos. Poco a poco fueron contaminados por poderes que debían permanecer enterrados por toda la eternidad bajo sus pies. Y finalmente fueron corrompidos y mancillados más allá de cualquier posible redención.

Los Enanos Malditos se deleitan en sus bajas pasiones. Viven por y para el dominio, el control y la violencia. Y disfrutan demostrando que lo que otras razas llaman corrupción, no es otra cosa que la seña de su superioridad. Saltan a la Arena en pleno éxtasis, y únicamente suelen salir de ella tras bañarse en la sangre de sus enemigos. 

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